Querer a sus hijos sin dejarse devorar

Querer a sus hijos sin dejarse devorar

“Mi hijo me devora”, suspiran las madres. “Consigue vampirizarnos completamente”, observan padres refiriéndose a ese niño que siempre está protestando, que se pega como una lapa, que nunca quiere estar solo, que monta en cólera, que se comporta como un pequeño tirano…

La dificultad de imponer límites a un hijo hay que buscarla en la historia de cada uno de los padres. Las madres lo hacen lo mejor que pueden pero se culpan de no hacerlo suficientemente bien. Y acaban hartándose. Además, muy a menudo los padres no se involucran demasiado.

Lylian Nemet-Pier, psicóloga clínica y psicoanalista, invita a las madres a identificar aquellos momentos en los que podrían actuar de otra manera: conformarse en que no son perfectas, permitirse tener sentimientos negativos, delegar más en el padre, ser egoístas y pensar más en ellas mismas…

Así, saliendo de esta espiral negativa toda la familia saldrá ganando.

Índice:

Capítulo1. Devoración y ambivalencia. La devoración es  fluctuante. La ambivalencia de los padres. Por qué las madres se dejan devorar. Los padres ¿se dejan devorar menos que las madres?

Capítulo 2. Cómo responden los padres exasperados. Ceder. Dejar hacer y luego reaccionar con contundencia. Negociar. Gritar. Hacer callar. Callar. Encerrar. Culpabilizar. Amenazar. Comparar. Volver al trabajo. Delegar. Responsabilizar demasiado pronto. Insultar, humillar. Pegar. Maltratar. Sacudir.

Capítulo 3. Dejarse devorar por un niño pequeño. “No soy tan feliz como pensaba”. Ese bebé que llora sin descanso.

Capítulo 4. Sólo se le oye a él. Lloriquea constantemente. Siempre le duele algo. Siempre está reclamando. Tiene berrinches por cualquier motivo. Se pelea constantemente con sus hermanos.

Capítulo 5. No nos deja. No duerme nunca. Siempre está pegado a nosotros. No sabe entretenerse solo. Siempre tengo que ayudarle a hacer los deberes. Nos llama constantemente por teléfono.

Capítulo 6. Nos invade. Me roba todo mi tiempo. Ocupa todo el espacio. “Nos arruina incluso las vacaciones” “Nos impide que estemos juntos”.

Capítulo 7. Ser padres. Reconozca los sentimientos negativos y acéptelos. Tómese su tiempo.  Identifíquese con su hijo en su justa medida. Delegue. No renuncie completamente a aquello que es vital para él. No se dedique únicamente a sus hijos.

Conclusión. Bibliografía.

Año Publicación 2015

20,30 

error: Content is protected !!
0
    0
    Tu cesta
    Tu cesta está vacíaVolver a la tienda